El informe PISA ha vuelto a dar un varapalo a la educación española. PISA refleja un estancamiento de más de una década en lectura y matemáticas y nos sitúa por debajo de la media de la OCDE.
Los países asiáticos se encuentran a la cabeza de todas las asignaturas, liderando toda la lista Shangái, y seguido, muy de cerca, por Hong Kong, Singapur y Japón.
El gran superdotado, Finlandia, ha bajado algún puesto, pero aún así se sitúa en unos niveles notablemente superiores a los españoles.
España superada por casi todos - por no decir todos - los países componentes de la Unión Europea, acentúa el distanciamiento entre los resultados por género. Los chicos ganan en matemáticas y ciencias, mientras que las chicas sobresalen en lectura.
Gomendio asegura que los resultados obtenidos no se asocian a una mayor inversión, pues el presupuesto ha crecido un 35% en una década.
El Ministro Wert plantea sofocar esta situación compleja para la situación española con una reforma educativa que no es secundada por ningún otro grupo parlamentario y que ha conllevado a numerosas manifestaciones de la ciudadanía.